Con rachas de viento de hasta más de 30 metros por segundo, ha pasado la tormenta denominada Seija haciendo lo que le ha dado la gana.
Durante la noche más de 200 000 viviendas ha sufrido por falta de electricidad. Entre ese número de hogares, estaba el nuestro. Estuvimos 7 horas sin electricidad. Al despertarnos, desayunamos a la luz de las velas. Este otoño ha sido tormentoso y para ello es bueno prepararse bien, aunque sea con una hornilla de gas.
Árboles grandes se han rendido a los vientos de Seija destruyendo lineas eléctricas, casas, coches, etc. No se reportan daños humanos.
La verdad es que nunca he escuchado al viento soplar en Finlandia a como lo hacía en la madrugada. Me hizo recordar la cercanía de los huracanes del Caribe.